martes, 3 de diciembre de 2019


NUESTRO VIAJE….
                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                        Sabía que esta noche volverías a viajar, irías al pasado, al futuro y volverías, me angustiaba saber que regresarías triste y confundido. Tomé una mantilla y me dirigí al hospital era tarde, tenía que entrar rápido y evitar que te medicaran. Fue fácil, no son cuidadosos en ese maldito lugar, los guardias duermen y las enfermeras ven televisión.
Llegué a tu habitación y esperé en un rincón, oculta tras un mueble que llegara la enfermera. Cuándo entró y puso en tu boca esa pastilla, quedé atenta a que se fuera. Al salir, rápidamente me acerqué y te pedí que no la tragaras, no me veías estabas absorto en otro espacio, te besé y con mi lengua sentí que la pastilla seguía ahí. Pasé mis dedos por tus labios, abriste suave la boca y saqué el medicamento con mi dedo, sonreíste, lo que me devolvió la serenidad, sabias quien era….
Me recosté a tu lado, viajaríamos juntos, no te dejaría solo. Te abracé con fuerza y en un momento estábamos nuevamente en tu casa, me mirabas y sonreías, éramos tu y yo. Éramos distintos, no teníamos heridas, a mí no me habían crecido alas y mis trenzas iban amarradas. Tú sonreías y pintabas, tú sonrisa era especial…burlesca, es más te burlabas de mí, fumabas y me hablabas de un libro que me prestarías para que leyera, siempre tenías algo que enseñarme.
Todo parecía estar bien, mientras observabas, tomaste mi mano, sonreíste, pasaste tus dedos por mis cabellos…te entendí, ahora no tenía trenzas …habías vuelto, estuvimos y estábamos.
Como un remolino llegamos a otro tiempo, tú rostro cambio, te vi solo, triste, con heridas abiertas, quise ir a tu encuentro, pero,[OGSP1]  no era mi tiempo, solo podía observar, lloré tu soledad, me abrace a ti ,traspasabas tu angustia ,mis colores cambiaban se volvían grises, sentía como tu corazón latía acelerado observando a ese Gustab.
 El ¿por qué?, lo sabes tú. Tienes las respuestas, están ahí, latentes y lacerantes, ¿no es más fácil dejar de tratar de cambiar las cosas y enfrentar los demonios?,¿Por qué no abrir las heridas, limpiarlas y curarlas?,¿A qué temes, a que tus demonios sean más grandes que tú?
Gustab, te conozco, eres más grande y poderoso que todos ellos, tus heridas cerraran, si las limpias. Te ofrezco mis alas, para acabar con ellos, te ofrezco mis manos para curar tus heridas, solo pídelo…
Si me dices que nunca más viajaras, que miraras de frente y sin divagar todo lo que te atormenta, sí me juras que todo lo pasado, será solo eso...pasado, sí me prometes que volverás a ver con el alma, que tus ojos tendrán nuevamente el brillo de ella…Te prometo que mis pasos acompañaran los tuyos,
Cuando la luna ilumine, te acunaré entre mis piernas y velaré tu sueño, hasta que cada demonio sienta temor de nosotros.
Te guiaré, irás a ciegas, por cada lugar donde un recuerdo te atormente, tengo la fuerza para poder convertirlos solo en experiencia.
Te cubriré con mis alas frente al frío de la soledad, beberás de mis labios el néctar de la pasión.
 Dormirás en mis pechos arrullado por el ruido del mar, conocerás a nobleza de la entrega en cada caricia, mis ojos serán los espejos en los que verás tu alma.
Entraremos en el mar, los peces de colores besarán nuestros pies, traerán ofrendas de corrales y algas, ese será el recuerdo que quedará de la que nombraste como tu princesa… ahora solo la princesa de un reino más allá de la realidad.
Soltarás mi mano, yo me iré con ellos y tú de vuelta a la vida, tomaras la mano de la que te hará feliz, yo observaré, desde  la isla ,bajo el árbol, recostada sobre el musgo y las hojas, cubierta por el sol , con las zapatillas de colores y las trenzas sueltas...y seré feliz porque te veré caminar por la playa mientras fumas, te veré pintar te veré crear ,te veré sonreír ,te veré abrazar la felicidad…


Te pienso…(a Gustab)

Pensé en ti, mientras el sol caía, te imaginaba mirando el horizonte vestido de rojos y violetas que se difuminaban con sutileza. Te imaginé como tantas veces …haciendo sólo que te hace feliz, conformándote con lo simple, sin competencias, sin afanes, sin frustraciones…
Pensé en ti, cuando vi el mar furioso, te imaginé pintando, de colores inexistentes, con trazo apasionado, con arabescos febriles, con manos intensa…
Pensé en ti, cuando vi un hombre caminando pausado por la costanera, al encuentro de una mujer tan mayor como él. Se abrazaban y besaban como si fueran adolescente, como descontando minutos a la espera de ese encuentro. Creó que se besaban de antes… desde que se pensaban, te imaginé pensándonos……
Pensé en ti cuando vi los niños corriendo en la playa, obligando a las gaviotas a levantar el vuelo. Te imaginé elevando tu vuelo en plenitud…
Pensé en ti, cuando sentí el aroma a cocina casera, con mano de madre, cocina de aliños y cariños. Te imaginé en la mesa fotografiando mentalmente, el vapor y creando mil imágenes…
Pensé en ti, cuando recordé tu alma, esa que creíste perdida, te imaginé acariciándola, curándola...



CUESTIÓN DE EDAD…



Cuando cumplí los 50 años, empecé a mirarme recurrentemente al espejo como despidiéndome de mi juventud y supuesta belleza. Encontré arrugas, manchas, pliegues en los que nunca había reparado. Después de la ducha mi peor tortura era observar mi cuerpo en el espejo, (de hecho evalué sacarlo de ese lugar), mis senos perdieron turgencia, mi estómago colgaba inerte ,mis piernas y nalgas ya no eran atractivas ,entendí porque ya mi pareja no me tocaba ,ni me deseaba como antes cuando cada caricia era el preámbulo de un encuentro sexual, ahora un roce era una forma descuidada al encontrarnos en el mismo espacio ,teníamos sexo pero con un sabor a costumbre más que ha deseo, lo comprendía cada día más, me había vuelto una mujer poco deseable, él se mantenía bien con las cosas típicas de la edad pero para mí estaba bien, porque los hombres no necesitan estar tan cuidados como nosotras, además yo quería cuidarlo porque la competencia es mucha y en su trabajo las mujeres son muy bonitas.
Mi vida era plana, mi hijo ya hacía su vida, las visitas se distanciaban, yo me preocupaba de la casa y de mi trabajo que era lo que más me entusiasmaba pero que no me ofrecía mayor desafío, esto me exigía arreglarme un poco más para estar presentable en la atención de clientes.
Como un programa de autocuidado laboral, nos ofrecieron participar en talleres que serían implementados en la oficina, en informática se concentraba la mayor cantidad de jóvenes y en su gran mayoría hombres, nosotros en atención al cliente éramos un variopinto grupo en su mayoría mujeres, pero curiosamente votamos de la misma manera, yoga y cuecas bravas, pensé en que me quedaría y después de pensar en todo el tiempo libre que tenía decidí tomar los dos.
En la noche mientras cenábamos le conté a Manuel de los talleres y mi decisión, -que ridícula, como se te ocurre ya esta vieja para eso, en yoga después no te vas a poder ni parar, y cueca ¡te vas a poner esos vestidos bien pegados?¡estás loca! - fin de la conversación, tenía razón, como se me había ocurrido, no estaba para hacer el ridículo.
Se acostó molesto, yo tras él, en la cama lo busqué para que se relajara, como siempre lo hacía, no cedió, me di vuelta y me dormí al otro día fue lo mismo, solo que mientras se duchaba me di cuenta que su teléfono recibía una serie de mensajes y estaba en silencio vi como aparecía uno y decía –Te espero con desayuno-, ¿quién era?, al salir del baño se lo pregunte, me grito que era intrusa, que no podía hacer eso, que no me importaba y se fue.
Llegue a la oficina con desgano a veces pensé que haría si él se fuera, si me quedara sola, en eso pensaba cuando llego mi jefa y me dijo que tenía que inscribirme por lo menos en un taller que era obligación, en un arrebato le dije que ingresaría a los dos, iba a tomar tiempo para mí, estaba decidido.
Al volver, seguía enojado peleamos de manera muy violenta y dijo que se iría, mil veces lo dijo, nunca era así, al otro día lo vi arreglar sus cosas y me dijo que ya estaba harto, que él estaba para otras cosas, que ya no me quería, que no era lo que el merecía, que estaba   descuidada, que no lo excitaba, solo agresiones, era tanta mi pena y mi vergüenza, en realidad era todo eso, tan mal estaba, me fui llorando y buscando explicaciones.
En el trabajo todo era entusiasmo, era el primer día de cuecas, fue un día devastador, pero una de mis compañeras que noto mi pena me dijo que me quedara que me haría bien y lo hice, pero solo por no volver a casa.
Al inicio de la clase no pidieron que hiciéramos parejas, se acercaron los hombres y se ofrecían de acompañantes, a mí se acercó Pablito ,30 años, joven, alto, buen mozo, muy simpático, podría ser mi hijo, lo acepte porque en un gesto divertido se arrodillo ante mí y me dijo- acepte a este mil veces rechazado para tener el honor de lucirla en este digno salón- todos aplaudieron la ocurrencia, siempre hacia locuras así, en esas horas me entregue a bailar como si se fuera mi alma en ello ,,quería sacar mi pena, mi frustración, se hizo tarde ,solidariamente ,los que tenían auto ,acercaban a los demás ,mi compañero de baile se ofreció a llevarme ,yo acepte, me dejo en la casa no tenía ganas de entrar ,parece que él lo notaba porque solo me dijo -¿animo!-,así lo hice la casa estaba silente, yo triste.
La siguiente vez el profesor no planteo una presentación para el aniversario de la empresa, pero deberíamos ensayar mucho, nos motivó a ensayar en los tiempos libres, Pablito era muy bueno, yo trataba de seguirlo, pero me costaba, se lo dije y me explico que era cuestión de ensayo, que si quería nos podíamos juntar una vez a la semana a ensayar, yo le dije que me parecía maravilloso y que podía ser en mi casa, el acepto y quedamos de hacerlo los viernes.
El viernes desde temprano me hablo recordándome el ensayo, dijo que compraría algo para comer, luego del trabajo pasamos a un local, compro unas fajitas y tequila, yo no bebo, pero estaba decidida a probar cosas nuevas, ya había entendido que la partida de Manuel era lo que debía suceder y también sus palabras que resonaban en mi cabeza, debían ser un impulso para este cambio, era la hora de decir basta, de vivir, de amarme, no sabía cómo, pero aprendería.
Comimos, bebimos y bailamos, la cueca es seductora, pero Pablito, ¡podía, ser mi hijo¡, mientras bailábamos se le ocurrió que pusiera mi pañuelo entre mis pechos, en el paseo y el al empezar lo sacaría con los dientes, me reí y accedí, lo hicimos y nuestros ojos se encontraron de una manera, al rato descansamos hechados en el sillón, me dijo que tomáramos golpeaditos, yo no sabía cómo hacerlo y él me enseño ,fueron mucho hasta que aprendí la técnica, en ese rato yo deje mi pañuelo en el escote ,esperando seguir el ensayo ,me dijo bailemos y se corrió hacia a mí en el sillón sin pararse ,acercando mi boca al pañuelo, pero no lo tomo en su lugar tomo mi boca y me beso apasionadamente, yo lo disfrute ,hasta que me di cuenta de lo que pasaba y le dije que no siguiera ,me pregunto porque y le dije –puedes ser mi hijo-,-solo contesto –no lo soy-.y en un rápido movimiento me cubrió con su cuerpo, se movía sobre mí ,mis piernas se abrieron solas recibiendo al visitante ,sus labios calientes y jugosos cubrían mi boca como un bocado delicioso que no quería que se acabara ,me relaje y tome sus muslos con mis manos enganchadas como garras ,me mordía ,lamia ,tiraba, chupaba y recorría mi cuello mis labios mis hombros, sus manos tiraban hacia arriba mi vestido y yo entre mis piernas sentía su miembro erecto que chocaba en mi como anunciando su llegada ,se separó  de mi saco su camisa y pantalones yo tire mi vestido y quede en ropa interior lo miraba y era hermoso ,su piel morena ,velluda, caliente, tersa ,olía a perfume ,estaba caliente y dispuesta pero no me desnudaría frente a él así no más mi cuerpo no podía estar al nivel de las mujeres con la que se involucraba ,eso era seguro.
Me miro y se acercó me desnudo, yo rápidamente tome su camisa y me cubrí, no era capaz de exhibirme, tomo la camisa y la tiro, yo no la soltaba, era como si fuera mi salvación, se acercó suavemente y me beso, - me gustas toda -, solté suavemente la camisa, él me miraba y se acostó sobre mí, yo estaba húmeda, entro en mi como si siempre lo hiciera, fue un movimiento cadencioso ,lento ,rítmico ,profundo ,me besaba y tomaba mis pechos ,sin apuros ,era entregado ,distinto, intenso ,terminamos en un abrazo apretadísimo vibrando juntos.
Me miraba a los ojos permanentemente ,se tendió a mi lado y me abrazo dejando mi cabeza sobre su pecho acariciaba mi pelo y lo besaba ,pasaba sus manos por mi espalda ,besé su pecho y vi como su sexo reposaba, lo acaricié suavemente el tomo mi mano y me enseño el ritmo cuando recupero su vigor y yo podía sentirlo hinchado y palpitante saco mi mano parando el movimiento, mi sexo percibía mil cosquillas que recorrían mi columna, se incorporó llevándome con él, me dio vuelta como en un paso de baile y mi espalda quedo apoyada a su cuerpo sudado, me dobló junto con su cuerpo haciendo que apoyara mis manos en la mesa de centro ,yo solo quería sentirlo en mí, sentí sus dedos mojados recorrer mis pliegues e ir abriéndolos con ellos, preparaba el camino, subía y bajaba mientras mi respiración sibilante era un murmullo en la casa, sentía algo más suave ,más grueso ,más caliente, era si miembros acariciándome me abría como una fruta desprendiéndose de su cascara ,contenía mi placer apretando mis musculo para llegar en el momento exacto al clímax más profundo, al abrir las puertas y entrar irreverente, sentí que me desvanecía era una sensación embriagante nos movíamos al son de una melodía imaginaria ,solo tu voz jadeante rompía el silencio y calentaba mi lasciva creatividad visualizando tu cuerpo desnudo tras de mí. Fue tan largo como placentero ,noté su juventud en su magistral  y fructífero  desempeño ,estaba cansada  pero no quería dejar de desearnos  ,descansamos un rato ,fue al baño lo vi alejarse desnudo ,despreocupado ,poderoso .Al volver me dijo que si podía quedarse no lo dude ,le dije que fuéramos a mi cama cuando me metí en ella el tomo mi pierna y empezó a besarla al llegar a mi entrepierna la bajo abriéndolas ,puso un cojín bajo mis nalgas y enterró su cabeza en mi vagina lamía con fuerza su lengua dura como una daga que destazaba mis espacios y se hundía cada vez más adentro lo recibía jugosa ,su lengua descubrió la capucha que escondía mi rincón más arrebatador lo tomo entre sus dientes con suavidad tiritaba ,espere atenta el próximo movimiento  fueron dibujos circulares a su alrededor mis ojos veían solo una luz brillante y cegadora ,los vellos de todo mi cuerpo acusaban recibo de su estimulo. Sentí, como el subía sin despegar su lengua de mí, llegó a mi ombligo, en el entró su lengua como buscando un tesoro en su interior. No detuvo su camino hasta llegar a mis labios y tomando posición para depositar su sexo dentro de mí, me poseyó con el ímpetu de su juventud, con fuerza ,sin reparos, con un ritmo frenético que me obligo a equiparar su esfuerzo ,para terminar juntos en un climax ,tan febril que creí no resistir ,lo sentí temblar abrazado a mí …

Al día siguiente todo se desarrolló con la normalidad de una pareja ,desayuno en la cama  ,una ducha juntos, una tarde de sexo…
Desde ese día no nos hemos separado, tenemos este secreto ,porque yo lo quiero así, todavía me cuesta enfrentar a los demás con este hombre como pareja. Hoy lo llamo Pablo, en la cama y en la vida me ha demostrado que es un hombre adulto,quiere que trasparentemos nuestra historia,me dice que la edad es un dato y que el amor trasciende eso…lo creo, pero necesito tiempo para aceptar que es real lo que sentimos,mientras disfruto de todo lo que significa ser nuevamente una mujer feliz….     

sábado, 10 de agosto de 2019



OTRO DESEO…
Ya había cumplido un sueño soberbiamente, en la junta siguiente compartimos experiencias, me llevé los honores. Aunque muchas no creían mi relato, omití el nombre del caballero en cuestión porque era amigo de alguna de las presentes y como fui generosa en los detalles no quería, exponerlo ni menos despertar la curiosidad de mis amigas.
Solo dos de las participantes no habían logrado el objetivo, pero las demás estaban motivadas a ir por otra experiencia. Esta vez creamos un listado, hubo una audaz propuesta de apoyo entre pares, por decirlo de alguna manera, esta consistía en conseguir lugares, objetos, ropa y voluntarios para concretar el deseo.
Repasamos la lista y a medida que eras nombrada solicitabas lo que necesitabas, en algunos casos los más extremos se solicitaban hasta dos hombres,Decidimos llamarnos el Club de los Deseos, estos no tendrían  limite, pero se acordó informar a las parejas ya fuesen pololos, amantes o maridos sobre esta suerte de cofradía, el argumento seria que cada sueño cumplido era una mujer más feliz, más plena ,más creativa, más deseosa y además quedaba latente la posibilidad de cumplir los sueños de ellos en un futuro muy próximo ,era una oferta muy interesante.
El deseo que quedaba era sexo con un hombre con uniforme…era simple.Existe algo en la textura de los uniformes, el diseño, el corte que extrañamente detonan mi libido, analizaba mi anterior deseo y me di cuenta de una característica en común, eran casi “disfraces”.En el deseo anterior este hombre con una estética sacado de un libro de Anais Nin, de sombrero anacrónico y ahora uno con uniforme,Esa era la clave estos seudodisfraces como un fetiche.Desde mi adolescencia este deseo lo reserve solo para mí ,pero había llegado el momento.
Nuestra reunión fue a fines de agosto y el plazo siempre sería un mes, se pasó rápido el tiempo, la verdad yo estaba sobrepasada de trabajo por lo tanto no tenía posibilidades de concretar nada.
Para las Fiestas Patrias, quedamos de acuerdo en realizar un asado el día 19 en la noche en la parcela de una de las integrantes en El Monte, ella tenía un Centro de Eventos en ese lugar y podíamos alojar todos. Nos reunimos a las 12 del día para hacer un almuerzo, en la noche haríamos el asado de celebración.
Anocheció, dispusimos todo buena música, karaoke en el quincho que era enorme, bailamos entre nosotras. Había solo 4 hombres, a la hora de las cuecas se produjo el debate para decidir quién bailaba de china y quien, de huaso, fue muy gracioso. Patricia se apuró a decir que ese problema se solucionaría cuándo llegará su hermano con unos compañeros, de hecho, ella había comentado que su hermano se uniría después de la parada militar. Una actitud de ella me llamó la atención cuando comentó esto me miró y sonrió de una manera distinta, pensé que me lo había imaginado.
Pasó como una hora entre bailes, payas y chistes cuando, Patricia anuncia la llegada de Ignacio. No lo veía desde que teníamos 15 años. Miré hacia el corredor y vi entrar a 8 hombres con uniformes militares mimetizados, boinas y pañoletas blancas al cuello. No lo creía, entendí en ese momento las miradas de Patricia y comprendí que llegaban después de la Parada porque participaban en ella, luego salían de franco.
Saludaron, yo me mantenía un profundo e impresionado silencio. Fue familiar, cariñoso, presento a sus compañeros, yo grabe un nombre … Francisco.
Nos dispusimos a comer, Patty con los ojos me preguntaba cuál era el elegido, al llegar a Pancho, aprobé con un giño, lo invito a sentarse a mi lado, conversamos desde el primer momento, yo le hacía preguntas de la vida militar, él me preguntaba sobre mi trabajo. En ese espacio supe que era separado, que venía del norte, que tenía dos hijos, que no estaba en pareja y muchas cosas más.
Al terminar la cena, baile solo con él, pese a que él seguía calzando los bototos de su uniforme bailaba muy bien. Para mí el contacto cercano con este hombre vestido de mimetismo, me provocaba cosquilleos en algunos rincones de placer.
En algún momento a alguien se le ocurrió que la música fuera más lenta, comenzaron con boleros. Me abrazó con una intimidad exquisita, él era muy alto, mi cabeza reposaba cerca de su cuello, estábamos cómodos, conectados, me dijo al oído que mi pelo era suave y olía a frutas exóticas, sonreí, me acorde de los tiempos de discoteque y carretes juveniles, donde la clave para besarse eran los piropos al oído mientras bailabas un “lento”. Era muy ochentera su performance. Devolví el gesto preguntando - ¿te gusta? -. No era tan tímido, su repuesta fue rápida – no solo tu pelo me gusta- .¿Estábamos seduciéndonos?, sin duda alguna, después de eso me apretó con más fuerza.
Maca y Patty, me propusieron que fuéramos al baño. Es tan divertido este código entre mujeres, no tiene edad. Entraron mientras yo revisaba mi maquillaje - ¿te gusta Pancho, para cumplir tu deseo? - no lo pensé –sí, él es mi deseo-, fin de la conversación nada que decir.
Al volver, Pancho me propuso ir a buscar unos cigarrillos al auto. Fuimos de manera discreta según nosotros. Antes de llegar, me besó, su lengua entró imprudente en mi boca, no ofrecí resistencia, una de sus manos tomaba mi nuca, la otra mano apretaba mi espalda atrayéndome hacia él, nos besábamos con furia, preparándonos para lo que vendría, las caricias se hicieron más profundas. Decidimos volver, yo primero, luego él.
Mi ansiedad se acrecentaba con el paso de las horas quería que todo acabara y no fuéramos a “dormir”. Volvimos a bailar, me miró a los ojos y me dijo, que si esto no acababa luego sería capaz de tomarme sobre la mesa, ¡no me habría negado, pero no me gusta el sexo en público!
Por fin terminó todo ,nadie se fue así que distribuyeron los dormitorios ,estratégicamente.Me asignaron un dormitorio sola ,al lado del que compartirían Ignacio y Pancho.Debo decir que apenas hubo silencio ,la puerta del dormitorio se abrió y apareció él ,delicioso con su uniforme, mirándome lascivo y en su pantalón un bulto que delataba sus intenciones, un detalle me llamó la atención traía su boina puesta, el uniforme estaba completo, como si le hubieran dado la instrucción que así debía ser, lo agradecí, era lo que quería.
Lo esperé al borde de la cama mirándolo desafiante, sostenía la mirada clavada en sus ojos mientras abría mi vestido donde se asomaba el encaje de mi sostén. Cuando llego a mí, pase mi lengua por sus labios, el respondió con su lengua en mi cuello y en mi escote, le saqué la boina y desate su pañoleta la que metí en mis pechos con la libidinosa intención que él lo sacara, desabotonaba su camisa mientras él seguía lamiendo mi cuello y mi oído, lo sentía jadear y eso me calentaba poderosamente, con su boca rescató la pañoleta al tirar de ella el roce de esa suave tela me hizo gemir. Desabroché el cinturón, tiré de su camisa, el movió los brazos para que cayera, mi vestido ya estaba en mis caderas, los pezones estaban dolientes de placer aún aprisionados en mi sostén. Subí su camiseta y él la retiro con un movimiento certero, su pecho lucía velludo y firme lo besé acariciando sus tetillas, tomó mi vestido y lo dejo caer, para luego tirar de mi ropa interior, solté mi sostén mientras el bajaba con mis calzones, para luego subir lamiendo una de mis piernas. Debo comentar que poseía una lengua de grandes dimensiones. Estaba desnuda, él con premura sacó todo lo que le quedaba puesto, mientras yo me tendía sobre la cama y lo miraba extasiada. Pude ver su miembro, carnoso, no muy largo pero que impresionaba por su grosor. Estaba listo yo sometida, húmeda, lista, levantó una de mis piernas y me penetró, con calma como tomando medidas para luego desatar un ritmo frenético que me hizo obtener un orgasmo múltiple y sentir como el vertía en mí, un abundante licor, para inmortalizar este orgasmo. Quedamos cansados, pero él seguía explorándome mientras retozaba recuperando el aliento, posado en mi pecho, sus dedos palpaban mi monte como anunciando que buscarían la entrada a mí intimidad. Yo todavía veía candelillas, quería volver a sentir este arrebato. Pocas veces he llegado así al final, son pulsaciones luminosas que se acompañan de temblores y rigidez hasta sentir como entras en un profundo y cálido espacio donde no existe más que el placer, pierdes el sentido solo eres capaz de sentir. Él era la clave perfecta abría todas mis puertas de manera precisa como si tuviera una llave maestra, calzaba en mi como si un artesano con maestría hubiese tallado un solo molde de nosotros, para luego sepáralo.
 Sentí sus dedos escudriñando para enfrentar mi sexo, que se mantenía mojado y ardiente, pensé que ese era tu objetivo, pero tus dedos siguieron por mi planicie subiendo y bajando humedecido cada cierto tiempo por abundante saliva, que hacía de esta sensación una espera deliciosa ,hasta que te detuviste y dibujaste círculos al final del camino, era algo distinto…pero quería degustar esta nueva propuestas tus, dedos todavía húmedos por los fluidos de mi manantial trataban de derivar todo vestigio de resistencia ,con una presión suave dominaste mi territorio. Tú boca se hizo dueño de mis pezones los absorbías tu boca, se llenaba toda de ellos, era cachondo, osado, distinto. Al salir soltaste mis pechos, me quedé huérfana de placer, quería hacerte mío, solté tus brazos de mi cuerpo y me tendí dejando tu sexo en mi rostro, abrí tus piernas, mi lengua quería todo, jugaba inquieta saboreando la bien delineada vena que se presentaba poderosa bajo tu pene. Mi boca se llenó de tus redondas fuentes, para bajar caliente y filosa por el camino que llegaba hasta el beso prohibido, la punta trazaba espirales en tu hueco como si hubiese un tesoro por descubrir, mis manos subían y bajaban por tu tronco que irradiaba una energía insistente. Nuevamente sentí tu vibración y tus quejas como si sufrieras, enfrentabas una pequeña muerte, mis manos recibían tu liquida esencia, yo sentía como tu vibración la llevaba entre mis piernas y me hacía apretarlas para no perder el momento, te incorporaste y caíste entregado.
Me acosté a tu lado y mientras seguía sibilante, te besé hasta que recobraste el ritmo pasivo de tu respiración, me acosté sobre un costado y te abrazaste a mí, besabas mi cuello y espalda. Nos cubrimos, hacia frio, dormimos un tiempo que me pareció muy corto no lo podría definir, solo sentí cuando salías de mi espalda provocando el vacío, no abrí los ojos para evitar la despedida.
A los minutos escuché la puerta y me incorporé asustada, venias con una gran bandeja, todavía estaba muy oscuro. No podía ser el desayuno, pero me pareció una buena idea, traías, espumante, café, una salsa dulce de limón, piña, uvas.
Me pasó una taza pequeña con café, la bebí ansiosa, no sabía con qué acompañarlo. Al terminar dejo soló los recipientes sobre la cama, me tendió, como si fuese un lienzo que iba a ser pintado y comenzó untando mis pechos con salsa de limón, pintaba con ella mis pechos, era fría y estimulante. Esperé desesperada que él la lamiera, no fue así, acarició mi ingle y puso trozo de piña, jugosa y fría, su almíbar corría por mi cuerpo, mojaba la cama. Las uvas las ubicó en mi sexo como decorando mis pliegues, era muy grata la sensación de algo helado e intruso en esa zona, cuando terminó este ritual, con religiosa dedicación tomo la copa de espumantes y desde una buena altura comenzó a verter sobre mi ombligo, lo que hizo que mi cuerpo se contorsionara de placer.
Debo comentar que he tenido amantes creativos y otros que han quedado al debe, por su escasa creatividad. Pancho no titubeaba, no dejaba espacio sin llenar, pensé que quizás este escenario lo montaba en sus conquistas, pero en realidad no me interesaba, solo quería disfrutar porque este escenario… era para mí.
Limpió pulcramente mis senos, yo sólo cerré los ojos y me conecté …solo sentir, la caída del espumante golpeando mi ombligo y escurriendo por la piel me excitaba quería que me poseyera rápido, acariciaba mis pechos preparándome para el momento, sorbió el líquido, chasqueaba su lengua en mi cuerpo, en mi ingle con sutil cuidado mordía la piña y dejaba que su jugo que bajaba de su boca cayera en mí, llevó esta carga hasta mi boca y apretándola la dejo caer, el jugo entraba en la mía. Yo quería su boca, egoísta volvió al encuentro de mi sexo, dejando mis labios pendientes. Comenzó a sacar las uvas lamiendo. No podía más, quería que aprisionara mi botón y lo exprimiera como a las uvas, no tardó en hacerlo, mi cuerpo recibió esta descarga de placer derritiendo su esencia, que brotó como en una dulce cascada por mi sexo febril.
Fue una noche exquisita, excitante, única, generosa de placer…no me había equivocado en vivir esta experiencia, en atreverme, creativa, entregada, lasciva, solo con un código entre amantes donde todo puede ocurrir…sin límites…sin pudor… sin arrepentimiento…

sábado, 27 de julio de 2019


UN DESEO…

Tengo como hábito tomar un lápiz y escribir pensamientos, nombres, palabras, estrofas de canciones que me encuentre repitiendo mentalmente. Es una manera entretenida de matar el aburrimiento mientras espero, hablo por teléfono o tengo que escuchar algo que no es de mi interés.
 Creo que algunos de esos escritos dejado descuidadamente en algún lugar, donde alguien pudo acceder, me expuso a la situación que relataré y que es tan extraña como excitante.
Hace un tiempo mi hermana me regaló una serie de libretas que habían dado de baja en su trabajo y que ella guardó para mí, eran de hojas blancas y espirales, porque no solo escribo, sino que además hago dibujos y figuras que achuro con lápices de tinta. Tengo una debilidad por los lápices, los cuadernos o libretas, tengo muchas, pero nunca son suficientes.
Con ellas me dí a la tarea de escribir cuanto deseo se me ocurriera, había leído en alguna parte que si escribías tus deseos te focalizarías en ellos y tu cerebro se daría a la tarea de cumplirlos y había otra versión que hablaba de “decretar” por medio de escribir estos, mezcle todo e hice mi propia teoría, escribiría por si algo mágico pasaba.
A veces nos reunimos con mis amigas, cuando esto sucede les saco el máximo provecho en una de estas juntas conversamos de sueños sexuales no cumplidos, entre unos tragos y la confianza propia de los años de conocernos salieron los más libidinosos sueños que podrán imaginar; tríos, cuartetos, orgías ,disfraces ,uniformes ,lugares.
Consumimos las horas hasta el amanecer, despidiéndonos con el compromiso de una nueva reunión y con la tarea de cumplir al menos un deseo durante el mes, era un gran desafío.
Debo confesar que tengo un alto nivel creativo lo que permanentemente me hace divagar, por esto me senté a escribir que deseo elegiría, tengo dos más recurrentes, quizás son una derivación de películas que he visto y que despertaron mi libido escandalosamente. El primer deseo era un encuentro sexual en un callejón y el segundo un encuentro con un hombre con uniforme, extraño…no sé, era mi fantasía. Las escribí meticulosamente en una de estas libretas y la dejé sobre mi velador porque me llamaba uno de mis grandes amigos al que nunca hago esperar, me anunciaba visita para el día siguiente, almorzaríamos, veríamos futbol, jugaba Chile, me pareció un excelente panorama.
Esa noche revisé la libreta y releí mi deseo: “Quiero encontrarte como si fueras un desconocido, vestido de terno, un sombrero de medio lado que sólo delinee tu rostro, yo llevaré un vestido liviano sobre el una paschmina. Será de noche, cuando vaya sola a mi casa, caminaré y al sentir tus pasos tras de mí, enlenteceré mi andar solo para encontrarte, subiré las escaleras de ese largo pasaje, te miraré avanzar desde el primer descanso, levantarás la cabeza y bajo el sombrero podré ver como la luz da en tu perfil, te conozco, sé quién eres y cuál es tu intención, seguiré subiendo y jadeando por el esfuerzo y la excitación de esta cacería. Al llegar a un poste de luz que nada ilumina me apoyaré a esperar tu encuentro, caminarás lento con la cabeza baja sin mostrar tu rostro, llegarás a mí, me atraparás entre el poste y el muro. Me dejaré cazar. Mientras nuestras bocas se encuentran, te besaré hasta que nuestros labios se separen con dolor y pasión, tus manos subirán violentamente mi vestido, mientras tu boca muerde mi hombro. Yo besaré tu cuello, mis manos entrarán en tus cabellos, en tanto la otra buscará con ímpetu tu sexo, que ya lo sentiré erecto y caliente. Tomaré todo lo que encuentre a mi paso y lo estimularé hasta sentirte gemir, bajaras por mi hombro hasta mis pechos, mientras mi pashmina se desliza hasta caer y mi vestido se abre irreverente. Morderás mis pezones latentes, mientras yo me esfuerzo en mantener el ritmo en tu sexo, tus dedos entrarán en mis calzones corriéndolos hacia un lado mientras yo en un gesto cachondo me muevo para levantar mi pierna apoyándola en el poste. Te expongo y entrego esta fruta que se presenta jugosa y dispuesta, tus dedos juegan a entrar y salir, pero no es suficiente, te quiero más apasionado, más caliente, gírame, me tomarás por la espalda, yo solo me apoyaré en el muro y podrás entrar.
Quiero que sean embestidas fuertes constantes, te quiero poderoso, poseedor. Mientras, yo apoyo mi cara sobre el helado muro y mis manos golpean en el llevando el ritmo del placer ¡será delicioso! Terminaremos juntos y me apretarás contra ti para que sienta como tiemblas en el orgasmo. Nos besaremos y te iras como viniste, como una sombra.
Era mi deseo…  ¿Cómo se cumpliría? no lo sé. A veces las cosas más increíbles se vuelven realidad, esa noche repasar mi deseo estimuló mi mente y el autoplacer es una forma exquisita de calmar la pasión. No tengo pudor ni prejuicios en esto por lo que luego de la plenitud vino el descanso merecido.
Me preparé para recibir a Claudio, a veces llega más temprano y juntos preparamos el almuerzo, compartimos historias, escuchamos música, contamos nuestras confidencias y reímos de buena gana. Lo quiero profundamente, es un buen hombre y mejor amigo, su problema es que ha elegido siempre erróneamente, su entrega ha sido sin medir consecuencias lo que ha hecho de él un “descreído del amor”.
Llegó directo a ver la previa del partido, yo veía un reportaje del noticiero que era importante para mi trabajo, así que le dije que mientras terminaba, prendiera el televisor en mi dormitorio. Como a los 20 minutos lo llamé para almorzar. Fue una tarde divertidísima, gritamos como si estuviéramos en el estadio, luego de eso partió y quedamos como siempre de hablar por WhatsApp y vernos próximamente.
Pasaron dos semanas, y un día viernes saliendo de mi trabajo, me dispuse a caminar un rato. Estaba un poco aburrida y quería estirar las piernas, tomé una pañoleta que siempre tengo en caso de que refresque la tarde y partí. Soy mujer sin temores, ni miedos, soy cuidadosa más no temerosa, por lo tanto, no me preocupaba caminar sola de noche.
Caminé por el paseo marítimo que une dos playas, estaba fresco y solitario, pensé en volver a mi casa y me dispuse a subir la escalera. Cuando comencé a subir me giré a ver el mar, suelo hacerlo desde ese lugar, es como flotar sobre él. Al final de la escalera te vi, debo confesar que me asustó, la imagen era como un mundo paralelo. El hombre, el terno, sombrero, ¿Qué estaba pasando?, tuve ganas de salir corriendo, pero tomé una actitud de seriedad, revisé mi teléfono, subí decidida pero expectante, sentí tus pasos a la carrera y resuelta me di vuelta con el fin de encararte. Cuando me di vuelta estabas más cerca de lo que pensé, quedábamos casi bajo el poste, que en realidad era una luz miserable, te dije- ¿me estás siguiendo? - a lo que no recibí contestación, y sin levantar la cabeza, me empujaste dejándome atrapada entre el poste y el muro. Comenzaste a besarme, yo solo cerré los ojos, no quería abrirlos, sabía que era mi teoría comprobándose. No quería ver al protagonista, sentirlo ya era exquisito, sus besos, sus manos, era una coreografía aprendida de memoria, cada gesto, cada caricia fue igual a lo escrito.
Nos tocamos, nos descubrimos, con calentura y ansiedad, la única diferencia es que al terminar la libido seguía insistiendo en dominar. Nos abrazamos, esperando a que te recuperaras, quería más, ni siquiera esperé tu venia, solo bajé hasta tu sexo y mi lengua te ayudo a recuperar la virilidad. Lamí hasta que depositaste en mi todo el fluido que blanquearon mi vestido, eres apasionado, eso lo suponía. Pusiste una rodilla en el suelo como en una petición de mano, levantaste mi pierna sobre tu hombro, dejándome abierta a tu mirada y presa de tu boca que no demoro en posarse sobre mí, dándome el más penetrante y soberbio de los orgasmos. Mi cuerpo fue recorrido por un rayo de luces y espasmos que me hicieron perder la noción del tiempo y el espacio.
 Nos separamos, arreglé mi ropa y partí sin mirar atrás, era un deseo, un sueño, no había nada que decir, todo estaba de más.
Siempre supe que eras tú, que habías visto mis notas, que mi fantasía la hiciste tuya, que compartíamos otro secreto del que nunca hablaríamos, no era necesario ni siquiera tomar un acuerdo de mantener el silencio, solo lo disfrutaríamos como dos desconocidos que se encuentran en algún callejón. Espero tu libreta, ya  sabes dónde encontrar la mía…tengo muchos deseos por pedir… 



lunes, 15 de julio de 2019



LOS PINCELES….
Nunca me ha gustado el frio, detesto el invierno a veces suelo pensar en lo maravilloso que sería viajar siguiendo el sol, pero me conformo con los periodos en que brilla sobre mi cabeza. Para pasar de manera más agradable estos tiempos es que me gusta tomar mi atril, un lienzo, pinturas y muchos pinceles de distintos grosores, de pelos suaves y otros más duros, con ellos como compañeros me voy a alguna playa, un roquerío o algún lugar que me motive en la tarea de colorear el lienzo.
No pinto paisajes, me gusta pintar mujeres lo hago al aire libre, la luz, el viento en mi cara y la energía del sol, me pone impetuosa y dedico días enteros a un cuadro y he llegado a pintar uno completo en una sola tarde.
Siempre hay algún curioso que se acerca a mirar o a preguntar, al que le contesto con cortesía, pero sin mucho entusiasmo para que no interrumpa mi espacio de creación.
Una mañana me desperté muy temprano porque estaba ansiosa de pintar miré por la ventana y estaba muy nublado, mis ganas eran mayores a mi decepción porque en el noticiero anunciaban posibles lluvias por un frente que venía desde el sur ,odié esa noticia pero salte de la cama esperando que fuera una equivocación en el pronóstico.   
Me duché y prepare las cosas, incluí una colación, un termo con café y partí sin claridad de donde iría.
 Llegué a una playita pequeña cerrada por roqueríos que flanqueaban este pedacito de mar, baje mis cosas y me acomode en la arena ,hacía, mucho frio ,me serví un café y quede absorta contemplando el mar que llegaba a la orilla sin mayor sonido que el estallido de una suave ola ,era demasiada belleza.
Pase horas pintando, era mi paraíso secreto, sin ruido, sin observadores, sin preguntas, solo en uno de los roqueríos asomaba un balcón que parecía flotar  y por donde se asomaba un hombre al que veía claramente ,tenía el pelo canoso ondulado y un poco largo ,vestía una camisa blanca y unos pantalones beige, llevaba un tazón en la mano y un cigarro en la otra, se sentó en una silla cerca de una mesa que había en ese balcón más allá colgaba una hamaca rayada, me imaginaba lo placentero que debía ser esa situación porque la verdad yo tenía un poco de frio pero él se veía relajado y pensativo.
Divague mucho ya era tiempo de seguir pintando,permanecí un par de horas más y al empezar a bajar el sol tome mis cosas y me fui.
Al otro día pensé en repetir la rutina pero me ganó el hecho de tener que ordenar mi casa, pagar cuentas y otras cosas que no me dejarían estar concentrada.
 Pasó muy lento el día, me dispuse a dormir quería despertar temprano para salir a pintar, así que apenas abrí los ojos entre a la ducha y me puse un vestido negro hasta el suelo, liviano y fresco , encima un chaleco enorme, collares  y una pañoleta que rompía el negro con sus mil colores ya tenía todo organizado, cargué  y partí.
Cuando llegué ví que no estaría sola, había un hombre que jugaba con dos perros enormes que corrían felices a gran velocidad mientras el parecía que trataba de parar su carrera a manera de juego , los perros le ladraran y lo esquivaban y seguían su carrera sin detenerse, era un hermoso espectáculo.Me senté respetando una distancia prudente ,estire una colcha ordene todo sobre ella deje mi colación el termo y acomode el atril ,siempre lo ubico entre mis piernas ,las abro subo un poco mi vestido y entierro el atril para que resista sin moverse por la fuerza de los trazos más profundos, comencé mi labor.
 A lo lejos sentía los gritos y las risas de este hombre que al observarlo me pareció más que muy interesante ,lo reconocí era el del balcón ,no era guapo era atractivo y  llevaba puesta una camisa sin botones en tono crudo y un pantalón m                                                                                          oscuro doblado para no mojarse en el mar seguramente ,él tenía ese dejo de misterio que me seduce…
Había pasado un rato mi atención estaba en el lienzo y en una líneas que no me gustaban y trataba de eliminar ,cuando sentí que algo se acercaba ,al mirar me di cuenta que era uno de los perros que corría directo a mí ,me asuste y no alcance a reaccionar cuando vi que se frenaba ,me miro salto hacia un lado y el otro ,pensé que quería jugar pero todavía estaba asustada ,olio mis cosas y se llevó la bolsa con mi almuerzo que eran unos sándwich ,se fue muy rápido y comenzó a comer  a mediana distancia de donde me lo había robado. El dueño se acercó, lo seguía el otro perro que se paró sobre mi colcha con sus patas mojadas y llenas de arena -perdón vine a pedir disculpas y fue peor el remedio que la enfermedad-me dijo, en relación al perro a esas alturas estaba acostado sobre mi colcha, le dije- no importa me gustan los perros -ofreció traer algo para almorzar, pero me negué, se disculpó nuevamente y se fue con sus perros.
Poseía unos ojos …no se …extraños parecía que yo conocía esa mirada de ojos achinados y oscuros ….
Como a las 2 de la tarde tenía hambre ,recordé al perro y ya no me hacía gracia el robo ,un rato después apareció el dueño de los perros, con un termo y una bolsita ,me dijo que ahora si venía a pedir disculpas ,eso nos provocó risa .Me pasó la bolsa y traía varios sándwich, me dijo- ¡traje almuerzo para que perdones a mi perro que es un desubicado¡,- le explique que no era necesario, contesto que si no  quería los sándwich ,se los comía él porque no había almorzado , volvimos a reír .Su risa no era tímida de hecho era muy alegre y sonora.
 Me descolocó un poco la situación pero la quise disfrutar saque un sándwich y se lo pase, tomé uno observe que contenía, era jamón, mayonesa, lechuga y pepinillos, los que no me gustan mucho pero que por educación comencé a comer, él sirvió café. Era como una “NO CITA”, no había acuerdo, invitación o trato, pero lo parecía.
Interrumpió mi pensamiento, diciendo-pensé en no ponerle pepinillo pero me arriesgue ,que bueno que te gusten-, espontáneamente y sin pensar le dije- ¡la verdad no me gustan!- , nos reíamos a carcajadas ,después de eso conversamos mucho y me dijo que pintara tranquila que él se iba ,yo le agradecí el almuerzo, sonrió y se fue .Minutos más tarde lo vi en el balcón con un libro en la mano ,levanto la mano y saludo ,yo lo salude agitando los pinceles.
El resto de la tarde me costó concentrarme lo divisaba sentado en el balcón y me hacía mil preguntas, ¿Por qué esta solo? , ¿llegara su esposa más tarde?, ¿a qué se dedicara?,¿Cuál es su nombre?,¿Qué leerá?,¿Cómo serán sus besos?,¿será apasionado?, me censuré ¿para qué tanto cuestionamiento sino éramos ni amigos?. Al mirar por última vez el me hizo un gesto de despedida el que respondí.
Esa noche recibí la visita de quien era mi “situación “llámo de esa forma a quienes no tiene la condición de parejas o pololos ,hace mucho que no decido tener una relación de manera formal ,pero esta forma de relación ha sido aceptada con más o menos reticencia por los involucrados, cuando las cosas se ponen más exigentes y el caballero en cuestión quiere avanzar o formalizar por lo general es la marca del fin de la “situación “.Creo no haberme enamorado por eso no quiero relacionarme de manera permanente ,bueno esto es para una evaluación psicológica pero no es el tema de este relato.
Después de cenar sushi nos fuimos al sillón vimos una película y empezamos a besarnos, siempre es así no ofrece mucha novedad, lo que le sigue es una noche de sexo.
Esa noche fue distinta…en un minuto cuando me acariciaba, tuve destellos de la imagen del hombre de la playa, uno tras otro las caricia provocaban su recuerdo o que lo deseara no lo sé, mi “situación”, se impresiono con la rapidez con que me excite ,más aun con lo demandante y creativa que estaba, antes de que el reaccionara tome su sexo y comencé a lamerlo él estaba de pie y yo abrazaba sus caderas mientras mi boca tenía todo su pene dentro, comenzó a entrar y salir ,yo quería que perdiera toda la delicadeza y lo incite a que se moviera con más fuerza, el por supuesto no se negó, acabo dentro de ella ,su sabor dulzón y su textura espesa no hacían más que mantener mi libido en su tope ,me levante y me puse de espaldas a él tome su mano derecha y la puse en mi pecho desnudo y la otra la lleve a mi vagina separe sus dedos y puse el índice en mi clítoris el seguía sin tramite mi guía ,me movía rítmicamente frotando mis nalgas sobre su pene que nuevamente se erectaba sin mayor pausa, me frotaba con fuerza mientras el pellizcaba mi pezón, yo tenía mi brazo enganchando su cuello mordía mi hombro, estaba caliente como nunca lo había estado con él , al borde de un orgasmo me solté y me arrodille en la cama ofreciéndole una entrada que siempre le negué ,rápidamente sentí su embestida mientras me penetraba ,lo que hizo sin esfuerzo, yo mantenía la fricción de mi clítoris ,tuvimos un orgasmo magnifico ,caímos en la cama el sobre mí ,yo solo quería que se recuperara rápido, pero no fue capaz de continuar. Se durmió en “cucharita”, yo nunca abandone la imagen del desconocido, él era la motivación de la excesiva calentura.
 Mientras mi amigo dormido abrazado a mí y tomando mi pecho como propio, yo me di a la faena del auto placer me tocaba y me frotaba en su pene que descansaba flácido, eso no fue por mucho tiempo, porque mientras dormía se erecto sin problema ,me estimulé hasta que vino el placer y como todavía había una erección en mi cama, ofrecí mi boca al durmiente para calmar su miembro…así  fue.Luego me dormí profundamente agradeciendo al desconocido su aporte involuntario.
Desperté como a las 11 de la mañana, lo que no es común en mí, ordené todo con rapidez. Salí de la ducha con la intención de arreglarme con esmero, elegí un vestido de mil colores, me veía hermosa, irradiaba energía.
Mi viaje hasta la playita fue rápido en el camino me descubrí reconociendo que la pintura no era mi real motivo de este paseo…el motivo era el desconocido.
 Cuando llegue no había señales de él, mire el balcón y no estaba, el ventanal estaba cerrado y no se veía movimiento, me desilusión que no estuviera, pinte sin mayor interés y me fui temprano.
Al llegar me serví café del termo que lleve y que ni siquiera había probado, me tendí en la cama, pensaba en lo que me sucedía con ese personaje del que no conocía el nombre .Me quede dormida sobre la ropa desperté con el frio de medianoche y me acosté sin más.
La llegada de la luz me despertó ,estaba con ganas de volver a ese lugar y esta vez le preguntaría su nombre e investigaría un poco, dirigí mis pasos con  la decisión de que las cosas tomaran un rumbo más interesante.
Comencé a caminar por la playa buscando un lugar donde pudiera ver sin problemas su terraza, no aparecía nadie, el día estaba amenazante pero mi interés era mayor que la inestabilidad del clima. Me acomode y estaba mi vista clavada en el balcón  cuando sentí una voz en mi espalda muy cerca,-hola, varios días sin venir- me impresioné y se enrojecieron mis mejillas, me disculpe inmediatamente diciendo que me había  asustado ,le dije que falte  solo un día que ayer había llegado temprano ,-pero como si mire y no te vi,  ahhh¡ yo llegue un poco tarde de Santiago y creí que te vería ,pero no haz avanzado mucho-dijo analizando mi cuadro -no la verdad es que no ,ayer me dedique a mirar el mar y me distraje-.Nuestra conversación siguió como si fuera un hábito ,nos presentamos, Carlos era su nombre. Venía de las compras para el almuerzo, le gustaba cocinar, era escultor, le dije que yo era pintora autodidacta, me dijo que era muy buena. Seguimos una relajada conversación, cuando sentimos las primeras gotas caer, no pasó un minuto cuando una nubada atacó con furia, él en un movimiento rápido metió todo en la colcha . yo agarre el atril y caminamos raudos hasta el auto ,me di cuenta al meter las cosas que era  un gran desparramo de pintura ,llovía más fuerte  me dijo que fuéramos a su casa hasta que parase  un poco la lluvia y yo ordenara todo para no perder más pintura .Subimos al auto y rodeamos la playa ,llegando en segundos a su casa ,abrió un portón y entre ,subió todo  y yo lo seguí ,dejo la colcha  sobre la mesa y me di cuenta que nos corría el agua por todo el cuerpo ,nuestras ropas estaban pegadas ,parecía una película de esas gringas de amor, pero ni en el mejor de mis sueños pensé ser la protagonista .Ccomencé a ordenar todo ,él puso un hervidor y me ofreció un secador de pelo y su baño ,acepte sequé mi vestido , el pelo ,corregí el maquillaje que a esas alturas con el agua, parecía de Halloween.
Cuando salí, tenía servido el café en una taza muy grande  acompañado de galletas ,-gracias tengo mucho frio- .Mientras tomaba el café se paró y trajo una manta que puso en mi espalda ,le agradecí y le dije que era porque tenía los pies mojados ,me pidió que me sacara los zapatos, por supuesto que no accedí ,me dijo que no fuera tímida, se agacho y de manera muy familiar me  saco los zapatos dejando expuesto un tatuaje que tengo en el empeine ,una enredadera de flores, -muy bonito tu tatuaje- ,-gracias tengo varios más-.Era curiosamente todo muy íntimo ,me sentí de cierta manera intimidada ,aunque él no me transgredía,  su actitud solo era acogedora pero insisto muy íntima  ,-¿ almorzamos?,tuve la tentación de decir que no para aparentar ser una mujer correctísima que no se da esas licencias con cualquier hombre ,menos si no lo conoce lo suficiente, pero… soy demasiado tentada y dije que sí ,el saltó de su silla ,dijo que se cambiaría de ropa, me moría de ganas de ver el espectáculo pero me quede sentada imaginándolo ,volvió con una camisa estampada, parecía india, un pantalón ancho y delgado venia sin zapatos , su pelo lucía revuelto ,era exquisito habría hecho lo que me pidiera.Se calzo unas pantuflas que estaban en el living ,debo decir que el lugar era rústico pero bellísimo ,con grandes sillones  frente a una chimenea y el comedor  era una mesa para 8 personas de madera que parecía haber sido recogida de la playa  y pulida con dedicación ,todo frente a grandes ventanales que daban a dos balcones sobre el mar.
Falta poquito para que almorcemos ¿quieres algo para beber ¿–no gracias no bebo- ,¿y que más no haces? ,no fumo, pero amo el aroma del tabaco .me miró como si le hubiera dado una idea y saco un cigarrillo lo encendió, se paró a fumar apoyado del ventanal semiabierto ,se veía como una postal ,lo habría pintado ,se giró y me miro como si me hubiera pillado haciendo una maldad ,me preguntó que si me gustaba la vista , como no sino podía dejar de mirarlo .Preparó el almuerzo y comimos al terminar me ofreció un suave licor que pensó me gustaría y así fue.
Pasamos la tarde conversando de arte, de sus viajes, del amor, oscurecía y le dije que me iba, me pidió mi número de teléfono y se lo di, llevo mis cosas hasta el auto nos abrazamos, beso mi mejilla me miro a los ojos y pidió que le avisara cuando estuviera en casa.    
Todo el camino mantuve la sonrisa, al llegar quise avisarle, pero me di cuenta que en la emoción no le pedí su teléfono, en eso pensaba cuando sonó el mío, era Carlos, conversamos más de tres horas al despedirnos me dijo que había escuchado que al día siguiente seguiría la lluvia, pero que si quería podía pintar en su living. No sabía que decir ¿para qué pintaría en su living si yo no pintaba un paisaje que se observara desde ahí?, le dije que no quería molestar, pero que era un ofrecimiento muy tentador, me dijo -tiéntate y ven.
A las 9 de la mañana me levanté, dudando de la invitación.Al rato mi teléfono sonaba insistentemente, era Carlos me dijo que tenía el desayuno listo que me esperaba, ¿Qué? ,no entendía nada, pero decidí disfrutarlo tomé todo y partí.
Estaba nerviosa, el observante, le agradecí y mi ansiedad me traicionó, pregunte porque tanta gentileza -¡simple, porque me gustas, eres inteligente, divertida y bonita, creo que yo te podría gustar y veamos que pasa!, casi me infarte, creía que podía insinuar algo pero tan frontal nunca, bueno donde fueras haz lo que vieras ,versa el dicho y decidí disfrutar todo lo que sucediera.
Luego del desayuno ,nos sentamos en un sillón frente a la chimenea había comenzado a llover.intentó prender la chimenea , la casa se llenó de humo ,salió a ver qué pasaba y volvió al rato todo mojado ,con un manojo de paja que encontró tapando el tiro ,le dije que solo verlo me provocaba frio ,comenzó a seguirme para abrazarme con la intención de  mojarme  ,me deje cazar y en el abrazo , entre risas el primer beso ,largo ,intenso ,las lenguas se movían con ritmo ,mordí sus labio ,él los míos ,                                                                                                                                                      estuvimos mucho rato así ,hasta que nos separamos para que él se secara ,quería desvestirlo pero me gano la vergüenza ,adivino mis intenciones, tomó mi mano y me llevó a su dormitorio ,te voy a pasar algo para que te cambies, trajo dos kurtas de seda,  me sacó el vestido .el sostén , los calzones y me cubrió con la túnica   ,era como un ritual ,yo saqué su camisa arrastrando mis manos por su cuerpo baje sus pantalones y calzoncillos juntos ,le pusé la kurta y lo bése
 Nos fuimos al living me senté mientras el prendía la chimenea ,al terminar se acostó y puso su cabeza sobre mis piernas, tome un libro que estaba en el sillón “El Amante” ,una de sus páginas marcaba un capitulo, lo leí en voz alta, era sobre  donde tenían sus encuentros clandestinos, él  la baña ,la toma ,la ama ,leímos mucho ,hasta que dejamos el libro y comenzamos a besarnos ,la sensación del roce de la tela ,su  suavidad aumentaba la excitación ,él se arrodillo frente al sillón ,levantó mi kurta y dejo mi sexo expuesto, miraba y recorría con sus dedos mis labios, esperaba que fueran al encuentro de mi clítoris,   tiritaban al contacto de sus manos, besaba mi monte de venus mientras sus dedos seguían recorriendo y dibujando las formas de mi vagina ,hasta que su lengua tomo mi clítoris delineando círculos  ,para luego subir y bajar,  mi vagina como esperando que de ella emanara algún fluido que calmara su deseo y así fue le ofrecí en agradecimiento a su faena un orgasmo húmedo ,más que húmedo ,se recostó sobre mí y me beso, aún con mi sabor en su boca ,yo quería saborear lo que tenía para mí, pero no podíamos separar nuestras bocas ,mientras mordía su cuello ,me dijo que yo sería su escultura su manos recorrerían y moldearían cada rincón …yo estaba dispuesta a todo, nos giramos y quedo  abajo ,me deslice hasta llegar a su pene estaba  rojo ,sus venas se marcaban nítidamente ,era grande y largo ,no me imaginaba que tanto ,lo tome con mi mano y comencé a frotarlo con energía mientras mordía con suavidad los bordes de su entrepierna, estaba palpitante ,no deje de frotarlo, abrí sus piernas ,lamia  su llano iba desde sus bolas a su ano ,fue muy rápida su eyaculación cuando las primeras y brillantes gotas asomaron ,las capture con mi boca y el acabo en ella ,era esa mezcla tibia  de indefinible sabor  escurría por mi boca y garganta lo miraba mientras el limpiaba con sus manos mi boca  , nos abrazamos sin contemplar el paso del tiempo ,solo mirábamos el crepitar de la leña en el fuego.
Había bajado la intensidad del fuego y  bajamos a la alfombra con el pretexto de buscar calor, nos sacamos las kurtas abrí mis piernas recostándome hacia un costado mientras él con sus dedos aplicados de artistas  me penetraba al salir, se ubicó con sus piernas abiertas ,quedamos en tijeras ,llego tan profundo que sus embestidas me hacían morir en cada momento ,tuve varios orgasmos uno tras otro con ellos apretaba su pene dentro de mí y soltaba lo que hacía que el gimiera con tal estimulo, nos movíamos en un solo compas, cuatro orgasmos hasta que sentí lo que nunca había sentido, mi sexo vertió sobre él una gran cantidad de fluidos que simulaban un manantial transparente y cálido ,la visión de esto provoco en él un orgasmo que hizo que nuestro jugos se entremezclaran ,quedamos tendidos mi cuerpo todavía tenía sensaciones al sacar su miembro de mi lo que se demoró un buen rato.
Él me miraba ,se sentó y empezó a besar mis pies lamÍa mi tatuaje como si las flores pintadas en el tuvieran exquisitos sabores ,luego gateó hasta mi pecho para recostarse en él  y jugar con mis pezones como si fuera un niño que recién los descubre ,los tiraba, los movía hasta que los cubrió con su boca ,jugó mucho tiempo con ellos yo solo acariciaba su pelo y su espalda, se sentó sobre mis caderas yo descansaba de espaldas lo miraba largamente ,el miraba mi cuerpo y tocaba, como si fuera hermoso, recorría mis pliegues ,mis rollos ,mis cicatrices como si las memorizara, me causaba curiosidad ver lo que hacía .
Siempre me costó exponer mi cuerpo pensaba que no era deseable, que debía ser cubierto, censurado ,busque siempre trucos para no enfrentar la observación de otros, le dije -sé que no es bello - me miró sorprendido - la belleza es subjetiva, para mi, eres bella… llenas mi cabeza y mi deseo no puedo querer más -  me dio la seguridad que me faltaba para crear nuevas experiencias ,se tendió a mi lado ,me paré y  un puñado de pinceles ,me senté en sus caderas y comencé a recorrer su cuerpo con pinceles ,empecé por su cuello dibujando arabescos,  los dedos de mi mano libre entraban en su boca ,baje  a sus tetillas tome dos pinceles ,uno suave humedecido con mi saliva, luego uno duro humedecido con su saliva, los pasaba por sus tetillas en círculos los dos a la vez, él se  recogía con una contracción involuntaria, los seguí pasando por todo su cuerpo ,dibujé con ellos su sexo, sus bolas baje por atrás y estimule su llano hasta que con un pincel  entre suave en su ano, sin dejar de pasar el otro por el camino a el, en un comienzo se contrajo para luego relajarse y entregar su cuerpo a la experiencia ,suavemente cambie mi pincel por mí dedo, este estimulo le trajo un orgasmo certero ,la alfombra fue testigo.      Deje los pinceles y nos besamos nuevamente, me tendí en el sillón y el tomo mis pinceles repitió el juego en mí , pero abrió mis labios con su lengua para introducir los pinceles en mi sexo…1,2,3,4,pinceles de mango largo ,hacían la labor que antes hizo su pene, entraban y salían , mientras él jugaba con mi clítoris y yo aportaba estimulando mis pezones, termine con tanto placer como cansancio ,nos acostamos en el sillón a descansar y dormir hasta la mañana siguiente .
Se hicieron recurrentes los encuentros en su casa ,hasta que viajó a Europa donde exponía permanentemente y cuyos trabajos realizados en el período en que estuvo en la costa habían tenido mucho éxito ,dentro de ellos uno que se llamaba “Los Pinceles”, donde se divisaba una mano de mujer con un puñado de pinceles , el único que no estaba en venta, en alguna ocasión me dijo que era un homenaje a nuestros encuentros… de vez en cuando vuelve a Chile, me  llama  y yo voy pero antes tomo mi atril, telas ,pinturas y por supuesto los pinceles…..   

sábado, 6 de julio de 2019

A Don Juan...


A Don Juan…,

Fuiste una sombra con deseos tan oscuros como la noche que nos desveló, me cubrió tu oscuridad, me deje guiar, desnuda,a ciegas …siempre atada a tu voz.

Habías vuelto, me descubriste en mis pudores, mis prejuicios y mis miedos, los poseíste para llevarlos a un lugar lejano e incierto, los encarcelaste para liberar mi espíritu, sabias que estaba escondida, resguardada…

Solo tu podías hacer que me mirase en tu espejo, amparado en nuestra antigua historia de confianza y amores, confié…solo confié

Me descubrí en ti, te develaste en mi…  
¡¡bendita tu dualidad poderosa y embriagante¡¡
 que mil historias se escriban entre amaneceres e insomnio, que mil pensamientos se enreden entre tus sueños y los míos…
Me inclino frente a ti como el aprendiz al maestro, como el liberado frente a su liberador, agradecida de tus manos que soltaron mis trenzas ….

A la distancia…La de las trenzas sueltas…
   

miércoles, 3 de julio de 2019

EL EXPERIMENTO.


Dedico todo el verano a la administración de un local  comercial, conmigo trabajan dos mujeres  titi y marijó con las que además tenemos una relación divertida y cómplice lo que hace que los días se pasen muy rápidamente, una de nuestras entretenciones es evaluar los hombres que pasan o se acercan a realizar cotizaciones o compras, observamos sus cuerpos ,sus  actitudes y cuando notamos algo que nos gusta hacemos disimulados gestos para alertar a la otra ,en nuestra posteriores conversaciones imaginamos  ¿cómo besaran ?, ¿qué tan bien dotados están ?,¿cómo serán en el sexo?, estas fantasías terminan de erotizar nuestros ya estimulados sentidos, lo que nuestras parejas si es que estamos en pareja, agradecen al final del día por que llegamos ganosas y exigentes de pasión, cuando no existen estas nos damos a la tarea del autoplacer del que hemos adquirido una expertis exquisita y lejana de todo pudor o culpa.
Nos gusta coquetear solapadamente con algún tipo elegido según ciertos requisitos, cada seudo conquista las celebramos como propias, disfrutamos hacerlos creer que somos inocentes en estas lides y que caemos en sus frases rebuscadas, armadas o copiadas de algún carrete trasnochado, nos presentamos como mujeres serias pero simpáticas y alegres, de una mirada firme, pero con cierta inocencia que cubre perfectamente nuestras intenciones.
En este juego que llevamos hace un rato y que ha sido casi un experimento social que nos permite ver cómo se comportan algunos hombres frente a los estímulos que a modo de prueba les enviamos sin mayor objetivo que el de saber que son capaces de hacer y hasta donde pueden llegar, hemos convertido nuestro local en un laboratorio.
El poder que tiene una mirada profunda directa a los ojos ,una sonrisa sostenida y descarada, una palabra que pueda tener múltiples interpretaciones ,que queda a la imaginación, un movimiento descuidado que provoque un roce “casual” ,puede provocar  las más diversas y osadas reacciones, desde el piropo más tímido, una solicitud de  whassap ,un mensaje furtivo, un regalo inesperado ,un llamado  con el fin de volver a oír tu voz ,una declaración de amor eterno ,hasta un viaje desde Santiago por el día solo para volver a encontrarte ,todo esto sin más intercambio que miradas ,sonrisas y una que otra frase sin terminar que daban pie a fantasear el final y que tenían a este variopinto muestreo de varones buscando fórmulas de obtener favores .
El problema es que siempre existe una excepción y esta vez me tocó a mí, parecía ser karma, tanto juego, tanto análisis, y finalmente…era tan fácil caer.
Los fines de semana son caóticos demasiada gente preguntando, probándose, comprando, es agotador y como si fuera poco …los proveedores, a ellos los atiendo en un pequeño espacio aislado por un separador de ambientes ,son aproximadamente doce, todos hombres de distintas edades y de diversas nacionalidades, algunos tienen muchísimos años negociando conmigo, pero este verano apareció uno que el año anterior había pasado las últimas semana de la temporada y  que yo no olvidaba , joven, inteligente, amable, divertido y para mi gusto guapo , nuestros primeros encuentros comerciales era de tira y afloja para conseguir un buen stock a bajo costo, lo que provocaba un juego constante al pasar los días esto se hacía más intenso , los comentarios y miradas tenían otra forma…creía que era mi imaginación ,aunque no estaba tan clara ,en su mirada siempre encontré algo misterioso ,normalmente  no me cuesta entender emociones o intenciones en otros ,tengo una alta percepción y puedo leer el lenguaje del cuerpo al mentir ,generalmente esta mezcla no falla ,pero él  era distinto .Un sábado en que los visitantes era curiosamente muy pocos ,apareció… era extraño porque sus recorridos eran los domingos, le pregunte porque estaba aquí si era sábado y me explico que para cubrir mejor la ruta llegaría los sábados o los viernes y que  esos días atendería a los clientes de toda la costa, era un sistema más operativo y alojaría en esta playa ,me pidió un dato para alojar  ,tuve la tentación de decir ¡mi casa ¡ pero eso atentaba contra todo lo que postulábamos como “actitud de juego”, por lo tanto le recomendé un lugar a 2 cuadras de mi local ,le gustó y trato su estadía por esa noche ,estaba emocionada me hacía ilusión verlo más… pero siempre  pongo paños fríos a la situaciones que no controlo .Esa tarde conversamos mucho y fue como si nos conociéramos desde siempre, me contó pasajes de su vida que nunca imaginé y yo le delineé algunos episodios de mi vida ,nos interrumpió solo la llegada de otro proveedor al que odié por romper el momento, él se fue con el fin de acomodarse en su habitación, mi sorpresa fue que volvió al cabo de una hora con dos cafés exquisitos y un pequeño chocolate ,es uno de mis placeres ,le comente que me encantaba esta combinación y me respondió que lo sabía ,no entendí y le pregunte ¿Cómo lo sabes? , simple lo dijiste una vez cuando nos conocimos….me pasaron una serie de sensaciones ,me descoloco esa simple frase, conversamos mucho y al despedirse me abrazo con fuerza y me beso la mejilla ,yo temblé sutilmente.
Esa noche él fue mi sueño , mi húmedo y excitante sueño… el día siguiente llego en la noche, le hice un pedido ,conversamos y se despidió ,me dijo que esperaba volver pronto y que la semana se pasaría lenta porque estaba ansioso de volver ,guarde silencio mi mirada era suficiente para que se diera cuenta  cual era mi opinión, fue una larga semana ,mis compañeras seguían el juego y yo trataba de enganchar ,pero seguía con él en mi cabeza, me trate de ordenar y razonar que esto no era otra cosa que un volador de luces ,un juego ,más nada .El viernes ya esperaba su llegada al día siguiente eran como las 9 de la noche y mientras atendía sentí una mirada, al volverme lo vi observándome, sus manos en los bolsillos ,jeans , sweater ,chaqueta de cuero y su sonrisa ,no lo creía ¡ entro y saludo por supuesto nos quedamos atrás conversando, me conto sobre su semana yo de la mía y en un momento me dijo …quería verte… no pude contestar ,mi experiencia ,mi poder ,mi razón se derrumbaron quede expuesta, sonreí y solo dije que bien¡¡¡  respuesta estúpida…QUE BIEN¡¡¡ ,no podía decir algo más inteligente? NO ,solo quería besarlo y fue lo que pasó nos besamos en la despedida como si nuestras bocas fueran compañeras ,besos largos, las lenguas se enredaban ,mordíamos los labios con la pasión de una noche de buen sexo ,al separarnos nuestras manos estaban enlazadas con los dedos cruzados como si tuvieran la costumbre de estar unidas .Los dos días siguiente fueron rituales visita ,café ,besos ,el domingo se fue y yo quede con un gusto delicioso en la boca ,espere toda la semana y el fin de semana no llego, suelo racionalizar a modo de defensa ,por lo tanto pensé y comente que esto no era más que un buen momento y él aprovecho la oportunidad me reproche haber permitido que llegara más allá ,esa semana  fue entretenida un venezolano ocupaba sus mejores frases y trucos para conseguir algo más que una cita con Titi ella estaba feliz de su insistencia , marijo tenía la duda si terminar con su pololo porque había conocido un universitario que la traía más que dubitativa ….se había dado vuelta la tortilla ,pero insistíamos en mentir entre nosotras y decir que solo era entretención. El viernes apareció camisa blanca, pantalón de algodón, chaqueta de cuero y su exquisito aroma a tabaco y café, por supuesto tuve tiempo para pensar en cómo manejar la situación y me mostré simpática pero distante, él por el contrario me miraba como interrogando, yo sabía que no podría resistir mucho tiempo, le hice un pedido absurdo y lo invite a despedirnos,  no hizo ningún gesto que me insinuara mayor interés y partió ,por mi parte pateaba el suelo y maldecía su indiferencia. Al llegar la hora del cierre note que el venezolano le hacia la guardia a mi compañera, la otra se había ido de carrete con el universitario ,la despache  y cerré sola cuando  cuadraba la caja sentí que golpeaban, fui a abrir con precaución  (podía ser un robo) el pasillo es angosto y oscuro, no alcance a abrir completamente cuando empujaron la puerta y en el angosto pasillo me llevaron hacia la muralla ,me tomaban fuerte y me besaban con furia ,me di cuenta que era él ..por sus besos ,mientras me mordía me decía que por que estaba enojada, yo no entendía nada solo quería que no me dejara de besar, metía sus manos por debajo de mi blusa y subían por mi espalda, yo hice lo mismo con el pero eran mis uñas las que rasguñaban suavemente su espalda ,lamia su cuello y él no me dejaba buscaba mi boca con desesperación ,cuando la encontraba mordía y tiraba mis labios, sus manos bajaron apretando mis glúteos, sentía su sexo ,erecto, punzante me causaba placer ,mis manos bajaban decididas por su estómago jugué en su ombligo
seguí …entré en su pantalón bajo el cinturón, sus manos empezaron a apretar como garras mis glúteos …era exquisitamente excitante ,tome todo… lo cubrí con mis manos que son grandes y suaves ,el comenzó un movimiento que yo acompañe, con destreza levanto mi vestido , entro en mis calzones tocaba suavemente mi vagina como conociéndola ,era una extraña dualidad ,la pasión de sus besos y la suavidad de sus manos ,teníamos una conexión actuábamos igual, nos descubríamos, le pedí entre gemidos que me soltara ,lo hizo me tomo la mano y me llevo a la parte de atrás me empujo al asiento y se sentó frente a mi abrió mis piernas y estaba tan cerca que sus rodillas tocaban mi sexo ,sentados frente a frente ,me dijo se acabó el juego llevo un año esperando tenerte….abrió mi blusa y bajo por mi cuello me besaba entre los pechos mientras sus manos buscaban mis pezones ,los que son muy pequeños y de grandes areola ,pero que estaban rígidos y expectantes al encuentro de su lengua ,por fin llegaba su boca hacía pequeños círculos en la punta del pezón ,metí mis manos entre su pelo ,y acariciaba su cabeza  ,el mordía mis pezones y los tiraba como lo había hecho con mis labios ,estaba al borde de un orgasmo, ansiaba su boca en la mía, lo retire  de mi pecho ,pase mi lengua muy suave por sus labios ,los mordí despacio y con mi lengua abrí su boca para besarlo profunda y rítmicamente, baje por su cuello besándolo mientras con destreza desabotonaba su camisa ,hasta dejar descubierto su pecho me incline y puse mis labios en sus tetillas solo los tocaba con ellos ,sentí como se tensó su cuerpo , entendí el gesto ,cubrí todo con mi boca caliente y húmeda ,mis manos bajaron y desabroche su cinturón abrí su cierre  , sus gemidos solo me calentaban más …lo tome de las caderas y lo invite con un suave movimiento a pararse sin despegar  mi lengua de su cuerpo ,con ella bajaba mientras él se incorporaba suavemente ,nunca solté sus caderas ,al llegar a su ingle la recorrí de extremo a extremo ,era exquisito sentir su placer … finalmente llegue a su sexo  ,baje más sus pantalones y quedo expuesto frente a mí ,puse  mi lengua en la punta …amo la suavidad  de la piel de esta zona, sentía como acariciaba  mi pelo yo percibía un motivador cosquilleo en la raíz de la nuca  a los pezones y bajaba directamente  a mi clítoris ,me volvía creativa ,lamia su sexo y mis manos recorrieron otros lugares donde el placer no se hace esperar ….metí los dedos por atrás de sus testículos y pase mis dedos causando suave presión entre ellos y su ano mientras mi boca tenía su pene entrando y saliendo de ella ,sentí la tensión del momento sublime …hice mío su orgasmo y solo esa sensación provoco en mí el más intenso  y el conmigo ..los dos  como uno solo. Nos abrazamos largamente después de tan cachonda experiencia…para algunas personas el sexo nunca es demasiado…nosotros éramos de esos…comenzamos nuevamente a besarnos, era más rápido todo, la pasión apremiaba, fue en ese momento cuando sentí una voz de hombre decir ¡alo hay alguien! ,me pareció familiar  pero yo tenía mis sentidos puesto en el placer, me levante arregle mi ropa y salí ,sorpresa¡ era el Capitán Espinoza , se preocupó al ver la puerta sin candado ,le explique que me atrase cuadrando la caja ,todavía mi cara denotaba el calor de mi reciente experiencia ,me pregunto si me sentía bien, nunca se imaginaria lo bien que me sentía…le dije que solo era cansancio… se despidió recomendando que cerrara luego porque era peligroso para una mujer estar tan tarde sola,  pensaba en lo divertido que me parecía su preocupación y yo sonreía con mi usual actitud de “señorita” .Al cerrar acomode mi vestido y él me esperaba con una sonrisa burlesca y exclamo ¡acá hay más peligro que afuera!, nos abrazamos y besamos con pasión ,le dije que debía partir porque era muy tarde ,caminamos juntos hasta el lugar donde  nos separábamos  me beso como una situación normal de pareja.
Esa noche ocupo todos mis pensamientos, recordé mil veces cada beso ,cada caricia, cada sensación …dormí abrazada a esta emoción, al despertar mostraba una aparente felicidad que es común en mi pero ahora tenía otro motivo, llegue temprano y comencé a abrir sola ,era muy temprano no había publico yo no quise quedarme más en la casa tenía la necesidad de respirar mar y llenarme de sol, cuando estaba arreglando unas boletas a los 5 minutos de abrir ,sentí olor a café, levante la cabeza y lo vi dos cafés y una bolsita que traía unas masitas…..quería despertar contigo y tomar desayuno en la cama pero es lo que hay¡ exclamo sonriendo ,así que tomaremos acá, ¡no lo creía!. Después de eso se fue a visitar clientes y yo levitaba, no quería tener a nadie, no quería sentir nada, solo quería jugar, pero el destino es caprichoso. Al cerrar me esperaba caminamos ,un rato y me pregunto sin pudor ¿Dónde dormiremos hoy?, no lo pensé, ¡en mi casa!, tomamos un taxi y nos fuimos ,solo basto cruzar la puerta para que cayéramos en el sillón ni siquiera vio el lugar necesitábamos estar uno en el otro ,abrió mi vestido tiro de mi collar de cuentas de madera ,el que hizo ruido al caer y fue lentamente sacando todo lo que me cubría ,una vez desnuda ,comencé a desvestirlo desde atrás levante su camisa sin desabotonar ,luego lo bese en la espalda y en la nuca ,mis manos bajaron abrieron su cinturón y el broche del pantalón  ,baje siempre por la espalda besando hasta sus glúteos y pasando la lengua en la raíz de su columna ,mientras tenia tomada sus manos las que caían rectas  a sus costados ,se entregaba a lo que yo le hiciera, saqué toda su ropa ,me di la vuelta y quedamos desnudos frente a frente nos miramos entraba un poco de luz por las cerchas de vidrio desde los faroles de la calle ,no teníamos pudor no habíamos esperado… parecía que por fin había llegado el momento,  aquí donde al contar esta historia me hace sentido el que mucha gente que aparece en nuestras vidas ya estuvieron presente en otras ,habrá quien se sonría incrédulo pero lo he sentido ,lo he vivido. Teníamos mucho tiempo para el sexo…nos tendimos en la alfombra ,abrió mis piernas y puso su cara entre ellas ,tocabas mis labios con delicadeza ,los separo y su lengua húmeda , dura subía y bajaba ,mi clítoris estaba atento ,erecto esperando su turno al llegar sentí mil cosquilla lo sorbió con fuerza , de mi emanaban fluidos de aceptación y placer, subió y se acostó en mi pecho lo cubrí cruzando mis piernas nos besábamos de una manera que para mí era nueva ,nos giramos y me solté abrí mis piernas y  quede en su espaldas, lo abrace por debajo de los brazos, lo acariciaba tocaba sus tetillas apoyando mi cabeza en la espalda ,baje a su pene lo comencé a acariciar ,lo movía con firmeza lo miraba por sobre su hombro él estaba semi reclinado en mí ,cuando vi que su pene estaba venoso ,duro y dispuesto me tendí abriendo las piernas para ofrecer mi sexo tibio y deseoso, me penetró  exquisitamente ,al acabar  volví dándole un espacio    que no era para cualquiera pero que el deseo me permitía en esta ocasión entregar ,no tenía limites ,ni pudores estaba dispuesta a ofrecer cada espacio de mi piel y a descubrir todos los que él entregara ,me tomo por la espalda ,acariciando mis pechos ,besaba mi cuello y lo sentía recorrer mis oídos ,su respiración agitaba la mía, hasta que el ritmo nos hizo vibrar en la misma frecuencia ,al acabar quedamos tendidos ,mirándonos no había nada que decir, solo recuperar el aliento para seguir deseándonos, su señal fue poner su mano en mi pubis y jugar los pelos que la cubre mientras yo pasaba mis uñas por su ingle, su excitación llego rápido se puso a un costado y comenzó a lamer mis pechos ,mi mano volvía a un lugar que en nuestro anterior encuentro había conocido tome sus bolas y las acaricie luego seguí con mi dedo medio ejerciendo suave presión en su llano ,el introducía sus dedos dentro de mí los doblaba como un gancho los movía con maestría , yo quería que se quedaran  hay para siempre  tuve un orgasmo furioso ,había tocado el lugar exacto y me llevo a la gloria ,yo seguí en mi labor y sentí como ya estaba a punto de llegar ,me acerque más a su sexo el que  quedo entre mi ombligo y mi pelvis, sentí el líquido tibio ,suave bajando por mi piel. Nos abrazamos hasta dormirnos despertamos con el frio de la madrugada ,seguíamos excitados ,lujuriosos me senté en el sillón aún desnuda  él  se arrodillo frente a mis piernas me tomo de los glúteos y me ínsito a pararme  mi sexo estaba frente a su cara ,abrió mis piernas y me hizo mantener el equilibrio mientras el pasaba su cabeza entre mis piernas y quedaba con ella  estratégicamente apoyado en el borde del sillón y bajo mi vagina, comenzó a lamer entre el final de mi vagina y mi ano ,pocas veces he sentido esos espasmos y con tal rapidez , estuvo largo rato hay yo mantenía y controlaba mi excitación para  hacerla más duradera, fue larga y sostenida ,como soy una amante aplicada y agradecida ,me di a la tarea de repetir en él lo aprendido, debo acotar que me titule con honores eso me lo hizo saber con un orgasmo largo y muy fructífero. Al terminar nuestra exploración nos envolvimos en una colcha que siempre tengo sobre el sillón, para las tardes de películas, nos besamos y juramos desearnos y dejarnos desear siempre que nos viéramos… Siempre…así fue…así es